¿Cómo reclamar una deuda correctamente? Consejos y Opciones
En el sistema judicial de España los acreedores tienen varios procedimientos para reclamar una deuda dineraria y lo más recomendable es intentar llegar a un arreglo extrajudicial para cobrar sus deudas antes de iniciar reclamaciones por vía de una demanda judicial.
RECLAMAR DEUDA O FACTURA IMPAGADA
Tarifas para cobrar una sóla deuda - Tarifa plana para cobrar varias deudas
Dos procesos para reclamar una deuda
El primer paso para conseguir un arreglo extrajudicial es que el acreedor notifique a su deudor mediante una reclamación que le es enviada por un burofax o correo certificado. Son canales seguros para enviar a la brevedad la reclamación del pago y plazo razonable para que el deudor liquide su deuda, condiciones requeridas de manera obligatoria para reclamar una deuda.
Vía amistosa o extrajudicial para reclamar deudas
Una vía es la amistosa mediante la cual el acreedor busca llegar a un acuerdo extrajudicial con el deudor para que pague la deuda, para evitar procesos largos, costosos y complicados en tribunales. Un dato importante al respecto, cerca del 90% de los casos por deudas se solucionan extrajudicialmente y un poco más de un 10% se hace una intervención judicial.
Proceso notarial
Hay varias vías para reclamar una deuda correctamente y una es reclamarla por medio de notario, acción que ahorra medidas más complejas como acudir a los tribunales, el procedimiento permite reclamar una deuda correctamente de manera alternativa a la judicial.
Para reclamar una deuda con un notario no es necesario un proceso judicial declarativo, sino que se ejecuta de manera directa. Es la reclamación de deudas dinerarias con el proceso monitorio notarial, el cual se basa en la Ley 15/2015, de Jurisdicción Voluntaria que se conoce como Ley del Notariado, en sus artículos 70 y 71, prevé la tramitación de cobro extraordinaria, rápida y sencilla.
Los notarios tienen como función ejercer ese tipo de acciones llamadas monitoreo notarial, los acreedores acuden a un notario del domicilio del deudor para reclamar sus deudas dinerarias, vencidas, líquidas y que sean exigibles. Necesitan de algún documento donde se haga constar la deuda como fiable.
Las reclamaciones de empresarios, profesionales o particulares entre sí pueden implementarse mediante la norma, donde el procedimiento notarial es útil para la reclamación de deudas, tan solo con acudir al notario para demostrar con el documento donde se especifica la deuda y con los requisitos, para que se proceda de manera correcta a solicitar al deudor que pague en 20 días.
RECLAMAR DEUDA O FACTURA IMPAGADA
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El deudor tiene la alternativa de acudir a la notaría a presentar sus alegatos para oponerse a la reclamación. Pero, si no paga o no se opone en el plazo convenido, el notario levanta un acto a modo de título de ejecución extrajudicial.
En otras palabras, los acreedores sólo invierten en un coste del requerimiento del notario, sin pago de tasas, ni cuotas de abogado o procurador. Es una opción que permite que en veinte días se presente el pago de la deuda reclamada o se produzca un título de ejecución extrajudicial, con lo que los interesados en reclamar la deuda, se ahorran el proceso judicial declarativo previo.
Que deudas no pueden cobrarse por proceso notarial
No pueden cobrarse por proceso monitorio notarial, las deudas que deriven de cuotas impagadas de propiedad horizontal, ni afecten relaciones entre empresarios y autónomos con consumidores o usuarios, es una prohibición que trata de controlar las cláusulas abusivas que ciertas empresas contra sus consumidores o usuarios.
Es decir, solo un Juez puede dictar sentencia sobre una deuda cuando los empresarios o propietarios reclamen impagos de esta índole a sus consumidores o usuarios. Al igual, que en caso de deudas relativas a menores, administraciones públicas o de personas con capacidades diferentes.
Ventajas del procedimiento notarial
Para reclamar una deuda el proceso notarial tiene un coste económico menor que un procedimiento judicial y es una alternativa que además, es más rápida ya que disminuye los lapsos de tiempo de manera efectiva, las gestiones para reclamar la deuda se resumen a la solicitud del reclamante y las acciones activa o pasiva del deudor.
A diferencia de los juzgados donde los acreedores deben esperar meses para la tramitación de sus reclamaciones, la vía de reclamar una deuda ante un notario se produce en el tiempo previsto o un poco más de lo que dicta la norma al respecto.
La información sobre si el deudor acepta la deuda y está dispuesto a pagarla o se opone y se plantea una batalla legal para no pagar, es una respuesta que el acreedor obtiene en cuestión de días, una ventaja para el acreedor ya que dispone en breve plazo de datos claves para proceder de manera correcta y realizar los trámites que correspondan en cada caso.
Las estadísticas de las instituciones judiciales reportan que cerca de un 50% de los procesos monitorios donde se solicitan el pago de deudas dinerarias, no tienen feliz término, ya que van a parar en un archivo, en algunos casos por no reclamarse en el Juzgado correspondiente al domicilio del deudor o por falta de datos sobre su domicilio.
Pero, cuando loas reclamaciones se realizan con la ayuda de un notario, por lo general estos piden apoyo a otros notarios y logran atender esos inconvenientes de conocer el domicilio real de un deudor con mayor facilidad, a favor de los acreedores que necesitan recobrar su dinero.
Una ventaja del procedimiento notarial para efectuar la reclamación de deudas dinerarias en España, está ayudando a que se generalice su uso y se disminuyan los casos de asuntos por deudas en los Juzgados civiles, aliviando sus cargas de trabajo en los tribunales y ahorrando el uso de materiales y recursos humanos que se necesitan en otras instancias.
Es una ventaja que contribuye a elevar el nivel y la calidad de la justicia española, ya que los abogados ahora pueden dedicarse a casos donde sí necesariamente se debe contar con su asesoría profesional y se reservan las controversias y gran parte de las reclamaciones de deudas dinerarias a la jurisdicción notarial.
La tendencia de los últimos años es que el proceso monitorio notarial se ha venido desplazando a la vía judicial para efectuar reclamaciones y cobrar una deuda de manera correcta y rápida, por lo que han venido convirtiéndose en una alternativa a la vía judicial para ese tipo de reclamaciones.
Cómo reclamar una deuda por vía judicial
Para reclamar una deuda cuando es necesario interponer una demanda judicial, la opción es la vía ordinaria con todos los documentos presentados en su original con la asesoría de un abogado, son necesarios para interponer la reclamación ante las autoridades y es un proceso que puede variar entre juzgado y juzgado y se debe tener claro que puede durar uno o dos años.
Los abogados orientan sus estrategias a la cuantía del litigio y cobran honorarios tanto del abogado como del procurador para la presentación de sus escritos formulados y la recepción de las citaciones y notificaciones del juzgado pertinentes y de acuerdo con la LEC.
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Proceso monitorio para reclamar deudas.
En el caso de que el deudor incurra en mora luego del plazo, es posible que el deudor se apoye en la Ley de Enjuiciamiento Civil (LEC) e inicie un procedimiento especial mediante un juicio monitorio, el cual es una medida por la vía ordinaria. Es un procedimiento simplificado útil para reclamar deudas dinerarias de manera correcta, sin límite de cuantía en la actualiad
El recobro de deudas vencidas y exigibles se realiza en el juzgado que corresponda para reclamar el pago del importe adeudado y se especifica el total, acompañado de órdenes de encargo firmadas por el deudor, pedidos, facturas, albaranes o/y otros documentos que comprueben la existencia de la deuda.
Si la deuda se expresa en otro tipo de documento donde no se indique ejecución, igual se puede reclamar con procedimiento especial o proceso monitorio, el cual implica acudir a los tribunales e invertir tiempo y dinero en trámites y es una solución para cobrar una deuda que se puede emprender, siempre y cuando el deudor no se oponga a la reclamación y acepte abiertamente el pago.
La Ley de Enjuiciamiento Civil que se introdujo en el año 2000, ha generado ventajas para los acreedores para que cobren sus deudas por ejecuciones civiles mediante procesos monitorios en los tribunales, aumentando las ejecuciones monitorias a un 40%.
Dado que no es necesario comparecer con abogado y procurador, pero es importante conocer que los abogados simplifican trámites y pueden formalizar la demanda ante un tribunal competente en caso de que sea el caso. Cuando la petición de juicio monitorio simplemente el juzgado solicita al deudor que pague o formule su oposición en un plazo de 20 días.
Cuando hay oposición de parte del deudor se pasa a un juicio declarativo, pero sí el deudor acepta su compromiso, se dicta oficio ordenando su pago y no cabe recurso en contra, los juicios monitorios suelen ser efectivos en deudas indiscutibles.
Conclusión
Vías alternativas para el cobro de deudas cómo Cobratis pueden ser las más apropiadas para reclamar cualquier tipo de deudas.
Para reclamar una deuda cuando no se llega a un acuerdo amistoso, es conveniente un procedimiento monitorio notarial preciso para las deudas de menor cuantía mediante el apoyo de un notario, ya que la vía judicial supone trámites de coste excesivo. Los abogados son asesores familiarizados para exigir de manera adecuada los procedimientos monitorios y judiciales.
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